Practicar en la playa
Hace unos días me llegó vía facebook la noticia de Patricia, una practicante de nuestro dojo, había estado practicando en las playas de Piura y estaba muy contenta. Muchos respondimos expresando nuestra alegría y hasta envidia porque nos hubiera gustado estar en la misma situación.
Apenas leí el posteo tuve una retrospección sobre las veces que he entrenado en la naturaleza y lo bien que se ha sentido y de ahí que me anime a hacer una nota sobre el particular.
Existe una mística y conexión especial cuando practicamos al aire libre y sobre todo cuando tenemos un contacto tan cercano con la naturaleza, no hablemos solamente de la playa sino también del campo, el mar o la montaña.
Los elementos tienen una influencia en la práctica, cuando uno practica al aire libre en cada respiración absorbe parte de esta energía, además, si estás descalzo, por los pies ingresa también parte de esta energía, con un poco de práctica y mucha concentración hasta puedes percibir su flujo.
No es casualidad entonces, que hasta Hollywood lo haya tomado como el cliché del entrenamiento, pues usualmente los victoriosos de las películas de acción entrenan en las montañas, bajo la nieve, en el lago o en el mar, mientras los otros entrenan en gimnasios muy sofisticados…
Esto no quiere decir que todos nos tenemos que dejar los gimnasios e ir a entrenar a la playa para poder ser buenos artistas marciales, sino que es un buen complemento del entrenamiento. Para tener un entrenamiento completo lo mejor es ir a un buen dojo o gimnasio, con instructores calificados y el equipamiento apropiado que permita desarrollar las habilidades y técnicas de manera correcta, de forma tal que el artista marcial logre fuerza, velocidad y precisión, de forma segura y evitando lesiones; y cada cierto tiempo conectarse con la naturaleza para probar el otro lado de las artes marciales.
Algunos entrenamientos naturales recomendables son:
- En la arena: correr, desplazamientos (muy interesante porque puedes verificar con tus huellas si has hecho el movimiento correcto), caídas
- En el agua: golpes, el agua genera una resistencia al movimiento que potencia el ejercicio, es típico el mantener ciertas posiciones y practicar diferentes tipos de golpes
- En la montaña: resistencia, correr en pendientes, acostumbrarse al bajo nivel de oxígeno
- Entrenamientos de invierno y verano: son los opuestos, que el cuerpo soporte el frio o el calor, genera resistencia.
- Las cubetas de arroz, para el grappling y los antebrazos, ver http://rosstraining.com/blog/2010/09/14/hand-training-with-a-rice-bucket/
- Usar árboles y cañas de bambú para golpear, como los famosos makiwaras okinawenses.
Entonces, hay muchas opciones para entrenar, para romper la rutina del gimnasio, pasar un fin de semana diferente y mejorar nuestro performance. Gracias Patty por compartir tu experiencia, yo soy uno de los que envidio no tener este tipo de prácticas en bastante tiempo. A los lectores los animo a que nos cuenten sus experiencias y que sigan practicando!!!